Kriegsfibel (literalmente, War Primer) es una colección de lo que Bertolt Brecht llamó “epigramas fotográficos” – cuatro lí­neas de versos subtitulan infinitas fotografías sacadas de revistas y periódicos. Casi todas se compusieron durante la II Guerra Mundial, mientras que Brecht viví­a en Escandinavia y en los Estados Unidos exiliado de la Alemania Nazi. SErá editado por su colaborador Ruth Berlau en la RDA, donde Brecht vivirá desde 1949 hasta su muerte en 1956. No será traducida al inglés hasta el 1998.

El tí­tulo, “War Primer”, recuerda a los libros de textos que emplearan en educación primaria para enseñar a los niños a leer. El objetivo de estos epigramas era enseñar alfabetización visual. Berlau escribirá en su nota introductoria: “La gran ignorancia que concierne a las relaciones sociales, una ignorancia nutrida cuidadosa y brutalmente por el capitalismo, reduce a millones de fotografías que ilustran la prensa a jeroglí­ficos que son indescifrables para el lector poco atento”. Como los antiguos jeroglí­ficos la fotografía de prensa resulta “indescifrable” para todos aquellos que no tengan el ojo entrenado . El libro de Brecht se ofrecerá así­ como un manual práctico, demostrando como “leer” o “traducir” la fotografía de prensa.

War Primer se podrí­a concebir como la “transformación funcional” de la fotografía de prensa al añadirle un texto revolucionario alternativo creado por el mismo Brecht. Pero quizá sea algo más allá. Si la elección precisamente del epigrama quisiera sugerir antiguas inscripciones, entonces la fotografía de prensa podrí­a concebirse como una suerte de ligeros monumentos portátiles, estatuas antiguas o edificios para servir a los cuales los epigramas fueron, precisamente, inventados. De este modo, War Primer se transformaría en una colección de monumentos portátiles, memoriales aplanados de la II Guerra Mundial. Una colección que registraría la respuesta de Brecht a dos fenómenos contemporáneos: la proliferación de los monumentos para conmemorar la I Guerra Mundial y el rápido desarrollo de los mass media, ambos sucedidos en los años 20

En el proyecto de Brecht no hay héroes, ni hay estatuas, ni piedra, ni bronce, ni tan siquiera un estuco temporal. Lo que hay son papeles, imágenes de papel recortadas de los periódicos y de las revistas. Para Krakauer, tales efí­meras fotografías son una ayuda para no olvidar. Para Brecht, si embargo, tienen un valor potencial de uso. Combinadas con sus epigramas, las fotografías, que han sido cuidadosamente seleccionadas, se convierten en monumentos, una ayuda para un “recordar crí­tico”.

DAVID EVANS teaches the history and theory of photography at The Arts Institute at Bournemouth and The Surrey Institute of Art and Design, His publications include John Heartfield: AIZ/VI 1930-38 (New York: Kent Fine Art, 1992)